envíos en 2-3 días
portes gratis a partir de 25€

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios. Si continúas con la navegación, consideramos que aceptas este uso.

close

¿Es importante el colágeno para correr?


Pubicado el: 07/08/2017 10:10:45
Categorías: Nutrición , Todos

¿Es importante el colágeno para correr?

Más allá de sus beneficios cosméticos, en los últimos años, mucho se ha hablado del colágeno y de su importancia para corredores. Eso se debe a que una gran mayoría de los corredores, tanto profesionales como amateurs, padecen de algún tipo de lesión en las articulaciones, principalmente en las rodillas. Lejos de desalentar la práctica del running, en este post queremos destacar los beneficios del colágeno para deportistas a la hora de conservar la salud de los músculos y articulaciones y prevenir las lesiones tan comunes relacionadas con este deporte.

Antes de empezar a consumir este tipo de suplemento, además de buscar orientación médica, es importante entender qué es el colágeno y cómo puede actuar en la prevención del desgaste de las articulaciones derivadas del running. Ha llegado el momento de que conozcas más detalles sobre el colágeno y aprendas cómo beneficiarse de este gran aliado para los corredores.

¿Qué es el colágeno?

El colágeno es la proteína que más abunda en nuestro organismo (en un 30%), y es el principal componente del tejido conectivo. Eso quiere decir que su principal función es asegurar la unión de las distintas estructuras del organismo. Asimismo, el colágeno es esencial en la flexibilidad de nuestro cuerpo, puesto que actúa en los movimientos corporales y determina el estado de nuestra piel.

¿Dónde lo encontramos?

Está presente en una de cada cuatro moléculas de nuestro cuerpo, en cartílagos, ligamentos, tendones, huesos, piel, tejido conectivo que protege músculos y órganos vitales, en la pared de los vasos sanguíneos, la córnea, el cuero cabelludo, las encías, la dentina…. Forma estructuras fuertes y/o flexibles, además de participar en funciones de locomoción.

En la piel, que es el órgano más grande de nuestro cuerpo, representando el 70% de su peso. En los cartílagos un 67%, en los pulmones 10%, en el hígado 4% entre otras.

¿Qué papel juega en nuestro organismo?

En grandes rasgos, se puede decir que el colágeno nos aporta elasticidad, estabilidad y resistencia en una gran cantidad de tejidos. Ayuda a evitar lesiones y actúa como amortiguadores que aseguran la ejecución de los movimientos corporales. A partir de los 30 años, nuestro cuerpo empieza a reducir la producción de colágeno y comienza el envejecimiento. La pérdida progresiva de colágeno para la población en general -y para corredores- puede generar fuertes dolores, dificultades para realizar movimientos sencillos como levantarse, caminar o incluso masticar y, por supuesto, se empiezan a acentuar los riesgos de sufrir lesiones que afecten a nuestro rendimiento.

¿Qué diferencia hay respecto a los corredores?

Por el constante roce de las articulaciones, principalmente de las rodillas, los corredores que practican el running regularmente pierden esta proteína mucho antes que las personas no deportistas. De ahí la importancia de reforzar esta substancia y acelerar su restitución. Asimismo, el colágeno es muy positivo para corredores ya que, al fortalecer las articulaciones, reduce el riesgo de lesiones, además de aumentar la capacidad de recuperarse tras el ejercicio y disminuir los dolores articulares.

¿Es recomendable tomar colágeno?

Por norma general, se recomienda la ingesta de esta proteína a partir de los 30 años. En el caso de los deportistas, principalmente los que se dedican al running, a partir de los 30, ya que disminuye dolores, fortalece articulaciones y previene las lesiones, además de ayudar a fijar el calcio de los huesos.

El colágeno es un complemento alimenticio que puede ser ingerido durante todo el año y la dosis diaria puede variar según la edad, la intensidad de los entrenamientos u otras patologías previas. En este sentido, es importante consultarlo con un especialista para que prescriba este complemento alimenticio según las distintas necesidades. Sus efectos empiezan a ser visibles a partir del primer mes de tratamiento.

¿Hay otros factores que influyen en la perdida de colágeno?

El estrés, la mala alimentación, dormir poco o mal o fumar son algunos de los factores relacionados con la pérdida del colágeno. Por cierto, si tienes problemas para conciliar el sueño, no te pierdas este post con 4 consejos para dormir mejor

¿Cómo podemos notar que estamos perdiendo colágeno?

La pérdida de colágeno empieza a notarse principalmente por el dolor en las articulaciones, lesiones poco habituales, mayor fragilidad en pelo y uñas, la aparición de arrugas y varices, entre otros signos. Asimismo, la falta de colágeno en corredores puede manifestarse por síntomas como dificultades de movilidad, dolor o inflamación de las articulaciones.

¿Qué alimentos podemos tomar para aportar colágeno a nuestro cuerpo?

Aunque es muy complicado mantener los niveles óptimos de colágeno en nuestro cuerpo únicamente con la dieta, sí es cierto que podemos contribuir a mejorarlos. Hay alimentos que, además de mejorar el rendimiento deportivo, como la carne de pollo, cerdo, pavo, ternera, buey, caballo y el pescado que son fuentes naturales de colágeno. 

Sin embargo, también hay alimentos que nos ayudarán a producir el colágeno, como aquellos ricos en vitamina C (naranja, kiwi, piña, melón), verduras (escarola, col, berenjena, coliflor), alimentos con aminoácidos (lácteos, clara de huevo, carne magra, pescado azul), frutos rojos (fresas, cerezas, tomates), alimentos con ácidos grasos poliinsaturados (verdura de hoja verde, marisco, pescado azul) y frutos secos.

En resumen, podemos afirmar que -pese a todos sus beneficios- los diferentes tipos de actividad física, como el running, generan un desgaste en el tejido cartilaginoso, por lo que la ingesta de colágeno en deportistas se convierte en una vía eficaz para fortalecer las articulaciones y prevenir las temidas lesiones asociadas al running como artrosis, tendinitis o condropatías.

Compartir este contenido

Añadir un comentario